La empresa saludable es una empresa más competitiva
El modelo de una empresa saludable se basa en invertir recursos para poner en marcha iniciativas enfocadas a mejorar el bienestar de sus empleados y a fomentar la adhesión de estos a unos valores de respeto mutuo que, está demostrado, redunda en la cuenta de resultados. Con personas felices se consiguen empresas seguras y saludables, y las empresas saludables son además empresas rentables. No en vano hay estudios que demuestran que las personas felices son hasta un 12% más productivas, por tanto, la empresa saludable es más competitiva. Los empleados felices permanecen el doble de tiempo en sus tareas, tienen un 65% más de energía y su vinculación a la empresa es mayor. Una empresa saludable es una empresa con ventajas competitivas.
Lo importante de las empresas son las personas
No debemos olvidar en todo este proceso que las empresas están formadas por personas. Aquellas organizaciones que las convierten en su prioridad, y que dan el paso hacía la creación de entornos saludables y felices, consiguen en el camino ventajas productivas y competitivas. Como consecuencia, la empresa saludable es también aquella que pone en marcha los procesos de seguimiento y medición de la efectividad de estos programas, lo que además transmite un compromiso a largo plazo de mucho valor que genera confianza entre sus trabajadores.
Los beneficios de adoptar un estilo de vida saludable en la empresa son muchos:
Mejora en la productividad individual
Fomento del trabajo en equipo
Menor riesgo cardiovascular
Atracción de nuevos talentos
Reducción del absentismo
Reducción de TME
Gestión de personal más eficiente
Menos bajas laborales
Control emocional